Y es que Piqué no quiso ser cínico en sus opiniones y reconoció que espera un año muy duro donde habrá que enfrentarse a nuevos objetivos y récords “La realidad es que empieza un año que será muy largo ya que primero nos tocan dos Supercopas que van a ser muy complicadas contra el Madrid y contra el Porto y queremos ganarlas porque son dos títulos que tienen que estar en nuestro museo” reconocía.
El defensa también quiso aclarar que todo eso solo será el aperitivo de lo que le espera a todo su equipo y a la afición durante el resto del año “Luego y a partir de ahí ya nos tocará afrontar la Liga, la Copa, la Champions hasta final de temporada” dijo.
El internacional español también quiso mirar al horizonte y recordar que después de toda la tensión que conllevará la temporada, hay otro objetivo, esta vez de todos “ también hay que pensar en la Eurocopa, para poder llegar al verano, al máximo nivel, al cien por cien e intentar ganarla para lograr un hito por nadie conseguido" recalcó.
Otro de los temas fue, el nivel de ambición que albergará un equipo que durante tres años ha cosechado éxistos sin predecentes, en clara referencia al rendimiento de los jugadores del Barça en el momento que entran en el campo " aquí somos todos los que intentamos ayudar al equipo en lo que podemos, además Pep nos guía y nos pide a cada uno lo que él sabe que podemos dar".
Recalcando además el barcelonés que por muchos triunfos que consiga el Barça, el modelo de juego siempre va a ser el mismo "el modelo ha sido siempre el mismo, el de tener la pelota, el de disfrutar jugando al fútbol, el de controlar los partidos, el de imponer siempre nuestro juego. Es la exigencia de estar en un club tan grande como el FC Barcelona" puntualizaba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario